viernes, 22 de octubre de 2010

Declaración Foro Internacional

FORO INTERNACIONAL PATRIMONIO BIOCULTURAL, SABERES AMBIENTALES Y DERECHOS DE LOS PUEBLOS ORIGINARIOS

14 y 15 de octubre del 2010

San Cristóbal y Las Margaritas, Chiapas.

DECLARACIÓN FINAL

LOS OBJETIVOS DEL FORO: PARA QUÉ LAS CIENCIAS SOCIALES
Los organizadores consideramos que es relevante realizar un Foro sobre esta temática frente a sucesos preocupantes como el franco estado de sitio y excepción que hoy existe en San Juan Copala - Oaxaca y que nos permite observar la desaparición del Estado tanto en ese lugar como en amplias zonas de México. A esto se suman las más de 1,700 personas desplazadas en Polho – Chiapas, en ambos casos se trata de actos realizados por grupos paramilitares con, al menos, la abierta tolerancia estatal. A esto se suma la lucha de los indígenas mapuches en Chile, aymaras en Bolivia así como de las poblaciones indígenas en Ecuador. Decidimos tomar la forma de una actividad académica, porque justo los organizadores somos investigadores y pertenecemos a instituciones académicas. Más aún, uno de los saberes más aceptados es el saber científico. El avance de las ciencias sociales es un elemento central como parte del progreso de cualquier sociedad. Sin embargo, la ciencia social no puede crear un conocimiento inútil, el conocimiento no es neutral. Cobra sentido la pregunta ¿para qué queremos ciencias sociales? ¿para qué sirven las ciencias sociales? De aquí el primer punto de la declaración:
A.- Las ciencias sociales deben generar teoría para la acción, que logre, con una sofisticada construcción de argumentos y con metodologías bien estructuradas para comprobar el conocimiento, transformar las condiciones de vida y de dominación de las personas.



LOS PUEBLOS ORIGINARIOS HOY: DESPOJO, CONDICIONES DE VIDA Y ESTADO DE DERECHO
Conforme avanzó el desarrollo del Foro uno de los elementos que se fue conformando fue un diagnóstico, el aspecto descriptivo que necesariamente debe anteceder a cualquier procedimiento analítico. En este diagnóstico cabe resaltar los siguientes puntos:
1. En México hay una gran diversidad cultural, natural, de conocimientos y saberes propia de los pueblos originarios.
2. Hay, también, un proceso de despojo de la riqueza de dichos pueblos. Este proceso de despojo tiene distintas dimensiones y formas:
a. La diversidad existente no logra traducirse en procesos de bienestar para la población.
b. Se observa un sistemático proceso de expropiación de tierras de las comunidades indígenas, sin comprender que uno de los elementos constitutivos de la identidad indígena proviene de la tierra. Uno de los elementos centrales en este punto es la transformación del concepto de “utilidad pública” como argumento de expropiación. Lejos de una idea de bienestar social, las expropiaciones se llevan a cabo para consolidar los intereses económicos de grandes cadenas de hoteles, de empresas mineras o de latifundistas.
c. Procesos de intermediación de los productos provenientes del campo que resultan intercambios profundamente injustos al pagar muy bajos precios que se multiplican en las ventas finales.
3. Este proceso de despojo y explotación tiene un impacto inmediato en las condiciones de vida de los pueblos originarios, como se observó en los datos correspondientes a la situación de la niñez en Chiapas.
4. Además del proceso de despojo, se observa también un fallido estado de derecho que no logra garantizar las condiciones mínimas de respeto, protección, y garantía de los derechos humanos de las personas integrantes de los pueblos originarios. Esto se observa especialmente cuando se da prioridad a los intereses patrimoniales empresariales por encima de los derechos colectivos y comunitarios de los pueblos y cuando, frente al ejercicio del derecho a la protesta como una forma extrainstitucional de garantizar los derechos, la respuesta estatal es la criminalización de la protesta, como se observó especialmente en los casos de intereses de empresas mineras, pero que se observa en otras dinámicas de explotación.
De lo anterior, el segundo punto de esta declaración:
B.- Los pueblos originarios han sido sistemáticamente sometidos a procesos de despojo de sus saberes, diversidad, productos y trabajo a la par que el Estado tolera estas formas de despojo, no genera mecanismos de respeto, protección y garantía de sus derechos y los criminaliza cuando ejercen su derecho a la protesta. Por lo anterior, podemos concluir que este modelo de ejercicio del poder es endémico y estructural al sistema político-económico mexicano y propio de la forma de producción capitalista en México.
Otro aspecto que se observó en el foro es la transformación que puede observarse en los pueblos indígenas, en particular con sus cada vez mayores interacciones con la urbanidad, sin que ello signifique ni la pérdida de su identidad como indígena, ni de muchas de sus costumbres y tampoco de su estructura colectiva.

CONSTRUYENDO FUTUROS: PROPUESTAS DE SOLUCIÓN
Frente a este diagnóstico, durante el desarrollo del Foro, se fueron encontrando algunas experiencias de éxito con respecto a estos procesos así como experiencias que recién arrancan con buenas perspectivas y propuestas por iniciar. Entre ellas destaca:
1. La experiencia de educación popular, auto-sostenible y con objetivos comunitarios que se desarrolla en el barrio de Albany Park.
2. La construcción de sistemas de defensa de la integridad personal como las policías comunitarias y la necesidad de reconocer instituciones indígenas de impartición de justicia. Asimismo es importante reconocer y analizar los mecanismos de justicia de los pueblos originarios que pueden ayudar a pensar formas alternativas de resolución de conflictos.
3. Su relación con la tierra y con su entorno natural. En especial la relación de muchos de los pueblos originarios con el maíz, lo que ha conformado no sólo un mecanismo de alimentación y sustento, sino también un fuerte saber cultural. En particular, se considera elemental el impulso de la producción de maíz por parte del Estado tanto para fortalecer la soberanía alimentaria como para hacer efectivo el derecho a la alimentación con un producto clave en la cultura alimentaria mexicana.
4. Se encontraron también promesas en construcción sobre participación política como el municipio autónomo de San Juan Copala o la reciente aprobación del reconocimiento estatal de la autonomía indígena en Bolivia. Un elemento central en los análisis de participación política fue la identificación de la pérdida de los objetivos finales de las organizaciones indígenas cuando pierden su autonomía y se corporativizan a través de lazos con partidos políticos.
Lo anterior nos permite entender que uno de los elementos centrales de las democracias realmente existentes es que no están cumpliendo las expectativas económicas y sociales de los pueblos originarios, pero, peor aún, ni siquiera están logrando generar las expectativas de inclusión política propia de la democracia. Lo que tenemos son democracias con ciudadanías de baja intensidad. Frente a las exclusiones económicas, políticas, sociales y culturales de la democracia y el modelo de producción y distribución económica realmente existente, los pueblos originarios están realizando sus propios mecanismos de gobierno y sistemas de economía. De aquí que una de las exigencias centrales de los pueblos originarios, al igual que cualquier persona, es el de libertad, donde libertad significa reconocimiento de dignidad humana y, con ella, de sus prácticas, saberes y cultura así como del desarrollo de sus capacidades para constituirse como entes efectivamente libres sin, con ello, perder la colectividad propia de su cultura.
De lo anterior el tercer punto de la Declaración Final:
C.- Existen múltiples experiencias exitosas de formas de organización de los pueblos originarios que han logrado mejorar su calidad de vida. Estos procesos se relacionan con las múltiples dimensiones de seguridad personal, desarrollo económico, capacidad educativa, manteniendo los elementos inherentes a la colectividad de los pueblos originarios.


DIÁLOGO DE SABERES
Las instituciones académicas y los investigadores que las integramos somos productores de un saber: el conocimiento científico, pero este no es el único saber. Los pueblos originarios también tienen un patrimonio cultural constitutivo de diversos saberes profundamente valiosos. Incluso, al interior tanto de los pueblos originarios como de los otros es relevante conocer la mirada femenina como un saber distinto e invisibilizado por la mirada masculina. De aquí el último punto de la Declaración Final:
D.- Frente a la existencia de diversidad natural y cultural, y pese a los diversos procesos de despojo propios del sistema político y económico que impera en México, la propuesta no es generar una ruptura, sino un proceso de diálogo intercultural de saberes que permita eliminar los procesos de dominación y construir formas de inclusión de los pueblos originarios.

DECLARACIONES DE SOLIDARIDAD
El Foro Internacional: Patrimonio Biocultural, Saberes Ambientales y Derechos de los Pueblos Originarios se solidariza con los compañeros desplazados de Polho – Chiapas y con los compañeros sitiados de San Juan Copala – Oaxaca. Para ellos un abrazo solidario en estos momentos difíciles.